Bajo este fin, se pretende que el estudiante desde su rol de actor principal del proceso pedagógico, sea un agente dinamizador y líder que promueva en los demás educandos el deber de mantener limpio el colegio y que las enseñanzas que imparta desde su ejemplo las puedan aplicar el hogar. Además pensando en una formación ambienta equitativa, los estudiantes trabajan de manera diaria en dicho proyecto, para lo cual se les ha asignado un día de la semana para que participe en las labores de aseo; esto se plasma en un formato del comité de vigilancia y control ambiental trabajado de manera semanal. De igual forma se les entrega una escarapela que los acredita como "patrullero encargado" a cargo de su grado.

Cabe decir que el aseo y la limpieza de nuestro colegio es una labor de todos y no de unos cuantos, por lo tanto todos los miembros de la comunidad educativa deberán ser participes activos de la presente propuesta y velar que los demás no arrojen sus basuras a suelo sino que lo hagan en los respectivos recipientes dispuestos para tal fin.

De igual forma resulta pertinente aclarar que la labor de ayudar con el aseo del colegio no debe verse como un medio de esclavitud del estudiante ni como un abuso de confianza para con los mismos, sino como una forma de educar el joven desde el hoy para que en el mañana sea una persona comprometida con el medio ambiente y con la sociedad, ya que esta exige que sus miembros sean ciudadanos de bien que velen por un ambiente sano y adecuado para las relaciones interpersonales.